miércoles, 16 de enero de 2013

Día 74: Inmerso en el Peronismo

Este era mi primer día en Buenos Aires y no tenía ningún plan en la cabeza. Me desperté a eso de las 10 de la mañana, bajé a desayunar y una chica muy simpática estaba buscando hacer un grupo para un tour por la ciudad, ni caída del cielo. En el tour nos iban a explicar el movimiento político en el que está ahora la Argentina. Visita cultural + algo de política + gratis = me apunté sin pensarlo mucho.

La primera media hora era de un documental sobre la historia de Perón, su mujer, etc. Según la chica todo lo que está pasando ahora viene de aquella época, aunque en eso no terminamos en ponernos de acuerdo. Después nos fuimos todo el grupo a la 'Plaza de Mayo' y de allí a la ' Manzana de las Luces' de vuelta a la 'Casa Rosada' para unirnos a otro grupo, cambar de guía e ir camino a la CGT.

Lo de la CGT era un poco extraño, en el segundo piso tienen tres habitaciones donde la 'compañera' Eva solía trabajar llenas de recuerdos, recortes, fotos, cuadros, etc. todo un museo para gloria de Eva Perón. Allí un viejete todavía enamorado de la figura nos contó cómo vivió la revolución de Perón y la muerte de Eva. En un momento de la charla ¡se puso incluso a llorar!

Aquí está el amigo en todo el apogeo de su historia
Después bajamos al salón de actos del primer piso donde nos explicaron lo que pasó con el cuerpo de Eva. Ella quería quedarse al estilo Lenin, momificada y en una de esas habitaciones para que todo el mundo la tuviera siempre presente, eso pasó por poco tiempo porque su cuerpo lo robaron, lo escondieron en un sótano, luego lo llevaron a Italia, luego a España... un trajín que no veas hasta que por fin lo enterraron en lugar seguro. Aquí acorto la historia porque daba para mucho y no quiero ser muy pesao.

Todavía Perón y su mujer muy presentes
Cuando salimos de allí fuimos al final del recorrido, al barrio de San Telmo, donde nos enseñaron las ruinas de una de las casas que la dictadura utilizó para torturar y matar a los disidentes y después derechos a la 'Plaza Dorrego' a tomar una copa mientras veíamos un espectáculo de tango (sólo apto para turistas)

Tantos años en clases de baile y no he visto yo a nadie de mi pueblo haciendo eso.
Después de comer empezó a llover y llover y así se tiró toda la tarde, así que aproveché solamente para descansar y charlar un poco en el hostal.

Un día de casi-relax se podría decir, sólo me llevo la satisfacción de haber convencido a un Argentino de que no tenía razón en idolatrar a la presidenta Cristina, a algunos les falta sólo ponerla en los altares.

No hay comentarios:

Publicar un comentario