La primera impresión que uno tiene de Luxor cuando sale de la estación es de un caos total, después de unas horas, esa primera impresión se confirma a cada instante. Al igual que en Aswan, salir de un hotel es como ir al frente, parece que todo el mundo tiene algo que ofrecerte, y insisten, insisten, te libras de uno y viene otro, y otro, y otro... ahhh!!!!. Después de mi dosis de protesta diaria os cuento mis visitas.
Primero Karnak: Llegué en taxi, que a las 10 de la mañana ya hacía calor, y un guía local, me ofreció una visita. Merece la pena visitar el templo sabiendo lo que estás viendo y un poquito de historia de la restauración y el tipo era egiptólogo, casi aprendo a leer geroglíficos: pajarito, serpiente, búho, hombre sentado....
|
Sala hipóstila, 134 columnas nada más y nada menos |
|
Ra en una de sus 3 formas, de dios de la fertilidad, veis el por qué? |
|
Os he dicho ya que hacía mucho calor? |
Luego Luxor: Este templo es mucho más pequeño pero está en el centro de la ciudad, al igual que el otro, es imponente. No se si era por la hora, pero estaba casi solo, según el tipo de la taquilla en un día normal todo estaría de bote en bote, pero que los turistas ya no vienen, así que se tienen que aprovechar de los pocos que llegan, eso es lo que leí yo entre líneas.
|
No una, ni dos, cientos de ellas desde aquí hasta Karnak (eso dicen) |
|
Los españoles reutilizamos mezquitas para hacer iglesias, aquí reutilizan templos egipcios para hacer mezquitas |
|
¡¡Qué solitario que está el obelisco!! su hermano gemelo se fue a Francia para no volver... |
Pareces un autentico moro nene!
ResponderEliminar