martes, 11 de diciembre de 2012

Día 55: Taupo, un pueblo que sorprende

Al día siguiente de sobrevivir a una erupción volcánica (aquí estoy exagerando un poquito), no tenía muchas ganas de hacer nada, pero estando de viaje es que no puedo estar parado, una vocecilla de mi cabeza me susurra todo el rato 'Alberto, no pierdas el tiempo, hay mucho mundo por ver'. El bus lo tenía a las 5 de la tarde, pregunté a la gente y todos me recomendaron ir a las aguas termales, estaban cerca y sonaba a visita+relax, justo lo que necesitaba.

Como siempre dos opciones: caminar en línea recta por el centro del pueblo o dando un rodeo por el río. A estas alturas no creo que sorprenda la decisión, otra vez caminata. Estas son algunas de las fotos del del camino, la verdad que sí merecía la pena. 

Agua más que cristalina, pero fría de cojones
Paisaje 1
Paisaje 2
Paisaje 3
Siento lo de los títulos de las fotos, no encontraba nada original, me ha pasado como a Miró con sus cuadros (pájaro y estrella, mujer y oso...). Al fín y después de casi una hora llegué a las termas, que resultaron ser una tubería de agua caliente de procedencia indeterminada que desaguaba en el río, en la foto parece todo muy natural, pero os digo que la tubería se veía. Ya que había llegado me tenía que bañar y al agua me fui. Yo no sé cómo la gente aguantaba semejante temperatura  al agua le faltaba poco para hervir, sólo me pude bañar en la poza en la que se mezclaba el agua del río.
Temperatura perfecta para hervir un huevo, de gallina o humano
Después de un rato de relax andandito otra vez a preparar la maleta y montarme en otro de esos buses interminables. El paisaje en este viaje totalmente diferente, ovejas siguían habiendo, pero as montañas habían desaparecido, todo parecía Hobbiton, de hecho, pasamos por la puerta de la original, donde se han rodado las películas.

Al llegar a la ciudad, registro en el hostal y paseo nocturno. Nada más por hoy. 
Otra vez en la 'civilización'

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